sábado, 13 de diciembre de 2014

Diez razones para estudiar fuera de tu país... (mis diez razones en Madrid)

Hace nueve meses inicié un Máster en Madrid, una experiencia única, que te cambia la vida. Te hace más fuerte, independiente y te enseña cómo afrontar retos. Súper enriquecedora. Aquí te dejo mis diez razones para estudiar fuera de tu país, en este caso en Madrid:


1.- Descubrirás un montón de nuevas palabras. En mi caso, aprendí que las cosas no son solo chéveres sino también bacanas, chicas, chileras, bravazas y de puta madre.

2.- Aprenderás a trabajar en equipo con otras culturas. Es toda una experiencia. Diferentes puntos de vista, diferentes modos de hacer las cosas, diferentes palabras para decir una misma cosa...

3.- Tendrás roomies que se convertirán en tu familia. No fue mi caso pero vi muchos así.

4.- Te retarás a ti mismo.

5.- Aprenderás que eres más fuerte de lo que sabías

6.- Lamentarás madrugar

7.- Tus horas de sueño se reducirán

8.- Desearás poder salir a conocer esa nueva ciudad en vez de estudiar, pero habrá tiempo para ambas cosas.

9.- El cereal será tu mejor y más rápido desayuno, y las pizzas o los bocadillos tu mejor almuerzo.

10.- Siempre habrá una excusa para celebrar y conocerás las bebidas espirituosas de cada país.

Y LA ÑAPA, la mejor de todas: Te quedarán un montón de panas en todo el mundo.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

10 razones para dejarse encantar con Madrid Río

Es difícil elegir un parque preferido en una ciudad rica en espacios verdes. Pero sin duda este verano uno de mis espacios predilectos ha sido Madrid Río, un parque que podría llamarse nuevo pues fue inaugurado en 2011, que bordea el Río Manzanares. No me imagino como podrá ser durante otoño o invierno, pero lo cierto es que durante verano es ideal para disfrutar del sol. 

Aquí mis 10 razones para dejarse conquistar por este sitio


1.-Es el espacio más cercano al elemento agua que tiene Madrid, el Río Manzanares. 

2.- Sus áreas verdes, al borde del río, son ideales para tumbarse a tomar sol. Le llaman algo así como una playa urbana. 

3.- Cuando el calor sofoca, del piso brotan unos chorros de agua donde niños y adultos se refrescan y gozan por igual.

4.- Tiene una caminería larguísima, de más de 10 km, ideal para correr, pasear o andar en bici

5.- Tiene canchas y una pista de skate park, ósea que para todos los gustos hay.

6.- Si no tienes bici propia, tranquilo que hay un puesto de alquiler para no perderte la oportunidad de recorrer el parque a pedal

7.- Sus puentes que atraviesan el río! Hay uno súper moderno circular, bien guay para tomar fotos

8.- Las áreas infantiles son súper monas, tienen tirolinas y hasta unos toboganes hechos como de una suerte de tuberías gigantes.

9.- Como a eso de mitad de camino hay unos chiringuitos que caen del cielo, para tomar y picar algo cuando el sol está en su puntos o más bien luego de broncearse, cuando ya se oculta

10.- Tiene acceso por Piramides y Legazpi. Alguien también me dijo que por Principe Pío pero no se si es del todo cierto.

La ñapa: si vas desde Piramides te conecta al final con el Matadero, un centro cultural con encanto propio, para pasar también otra buena parte del día. Pero eso ya será otro cuento, o en este caso, otro post.

¡Aún hay sol y calor para aprovechar!

miércoles, 2 de julio de 2014

10 cosas para hacer durante verano en Madrid


El sol brilla en Madrid y se oculta pasada las 22 horas. Las tardes son calurosas y de casi cualquier plaza o jardín brotan chorros de agua o sé encienden fuentes para refrescar los más de 30 grados que calientan la tarde. Es época de helados, terrazas, poca ropa y tintos de verano. Son días de verano en Madrid.

10 cosas que hacer en verano en Madrid

1.- Tras largos meses de frío y mucha ropa, la piel está ansiosa por sentir el sol calentar. Tantos espacios verdes en Madrid se traducen en múltiples opciones para ir a tomar sol ( sí, esto de andar en bikinis en plazas o jardines resulta curioso para quienes venimos del Caribe). Uno de mis sitios preferidos para esto ha sido Madrid Río. Puedes llegar por Piramides u otra estación como Legazpi. Es un parque súper moderno, tiene una caminería, quioscos para comer y tomar algo, rodeados de áreas verdes que bordean el río Manzanares, puentes que atraviesan el caudal y unos potentes chorros de agua que brotan del suelo donde se bañan chicos y grandes. Hermoso y refrescante. El Parque Juan Carlos I también es perfecto para la temporada.

2.- A falta de playa buenas son las piscinas en Madrid. Este año abrieron sus puertas a finales de mayo pero ahora es cuando se ponen buenas. La más visitada es la del Lago, del Centro Deportivo Casa de Campo. Las tarifas este año van entre los 5 y 7 euros, y se pueden adquirir bonos multiusos con 10 entradas que rondan los 42 euros.

3.- Cine al aire libre. Y es que lo que menos provoca con tan buen tiempo y tanto calor es encerrase en algún sitio, por eso hay espacios y jardines que se vuelven salas de cine. El Parque de la Bombilla, del Calero, la Casa Museo de Lope de Vega, Conde Duque, en el Castillo de Villaviciosa de Odón y La Casa Encendida son solo algunos de los rinconces donde harán proyecciones durante todo el verano. Es ‘San’ Google puedes consultar la programación.

4.- Fiestas de la Paloma. Por ahí por el 15 de agosto se celebra el día de la Virgen de la Paloma y todas las calles del centro se ponen de fiesta.

5.- Tomar un helado. A base de yogurt o clásicos. Hay quioscos que solo abren sus puertas durante esta temporada para venderlos y otros sitios, a modo de la clásica heladería, que son recomendados. Algunos que coinciden en diferentes listas son la heladería Los Alpes, en Chamberí, que tienen más de 50 años y Palazzo, en plena Puerta del Sol. Tú ,¿cuál recomendarías?

6.- Disfrutar de las terrazas. Ya dije que con tanto calor no provoca encerrarse en ningún sitio. Así que es el momento para sentarse en aquellas mesitas a las afueras de cualquier restaurante o bar. También son días para beber tinto de verano como agua.

7.- Andar en bici. Aunque algunos no se arriesgarían por el calor, el plan puede ser ir por algún parque, organizar un picnic, para luego terminar refrescándose en algún chorro de agua.

8.- Remar en el estanque de El Retiro. Por algo así como 7 euros das una vuelta en una balsita a remos, por 45 minutos, disfrutas de la vista y el sol, ¿por qué no?, cualquier lugar es bueno para broncearse.

9.- Aprovechar las rebajas de verano. Aunque algunas tiendas se adelantan algunas semanas, es formalmente el 1 de Julio cuando inician las rebajas de temporada. Una Buena oportunidad para renovar el guardarropa para la época y aprovechar una que otra pieza rezagada de invierno.

10.- Un picnic, en cualquier lado. Ya dije que Madrid tienen un montón de espacios verdes para aprovechar. Además, llegas al número 10 de esta lista y puedes aprovechar de hacer antes, durante o después cualquiera de los otros números.





sábado, 7 de junio de 2014

El Mercado de Motores en diez señas


El segundo fin de semana de cada mes el Museo del Ferrocarril, en Paseo Las Delicias (61), en Madrid, recibe a decenas de expositores que muestran sus mejores creaciones o adquisiciones en materia de moda, muebles, decoración, bisutería y demás para públicos de todas las edades. Es el Mercado de Motores -que puede sonar a otra cosa- pero es un muy diverso bazar.

Es un plan ideal para comprar piezas originales, curucutear, comer, beber algo o simplemente distraer la vista entre cosas tan curiosas.

1.- ¿Qué hay? Tiene como dos grandes áreas, una llena de emprendedores que muestran productos hechos del ingenio propio o lo que son sus negocios como tal. Hay ropa y juguetes infantiles, camisas con mensajes originales, piezas curiosas de decoración y muebles, sombreros, ropa y hasta vinos y aceites artesanales.

Los otros sectores, al descubierto, están dedicados a todo lo que es de segunda mano. Más al estilo mercado de los “corotos”, donde se consiguen lentes, teléfonos, cámaras viejas, ropa de segunda mano, bisutería, discos, libros y objetos de colección, solo por mencionar algunas cosas. Si añora algún objeto del pasado de seguro lo encuentra allí.

2.- ¿Cómo llegar? En Metro o Renfe, estación Las Delicias. Línea 3 del Metro. En la parte de atrás está el museo. Igual hay señalizaciones. Solo hay que bajar una callecita para llegar al lugar, por allí también pueden aparcar los coches.

3.- Precios: Las buenas ideas no suelen ser baratas. Hay piezas de bisutería desde los 10 euros y otras, como las cosas de casa, más elaboradas que llegan a los 100. Igual la misión es curucutear porque hay puestos con chollos que valen la pena.

4.-¿Y el ambiente? Súper rico. Hay música en vivo en diferentes sectores. Un señor tocando jazz estuvo en esta edición apenas uno entraba. Al final, en una zona descubierta, que llamaron “Playa vía” en esta ocasión veraniega, bandas se montaban a tocar en vivo, usando los trenes y vías como escenario. En otra ala había dj's mezclando música. Todos los espacios con opciones para comer y beber. Además, puede recorrer la feria y aprovechar de echar un ojo también a los trenes antiguos.

5.- Recomendado: De esta edición vale rescatar a Enmarte, que tiene vestidos desde 10 euros. O Alegría Industries que tenía camisetas muy monas en solo 3 euros. 

En el área de segunda mano sí se puede conseguir bisutería desde 0,50. De todas formas cada edición tiene diferentes expositores. Aprovechando las ediciones de verano, por 2,50 vale la pena tomarse un tinto de verano en la zona de la “playa”, mientras se escucha buena música.

6.- Contacto: En la cuenta Twitter @MercadodMotores puede seguir cada edición del bazar. También tienen cuenta en Facebook.

7.- Horario: en primavera-verano de 11.00h a 00.00h, otoño-invierno de 11.00h a 22.00h.

8.- Coste: Ninguno. La entrada es gratuita.

9.- El dato: El Mercado de Motores heredó su nombre de su primera locación, la Nave de Motores de Metro Madrid, en El Retiro, donde se realizó durante nueve meses, desde diciembre de 2012. En septiembre de 2013 se mudó al Museo del Ferrocarril por cuestiones de espacio. Se quedó chiquito el otro para recibir a tantos “curucuteros”.

10.- La ñapa (dícese en el coloquio venezolano de eso que te regalan en el mercado cuando compras algo): Quienes tengan negocios o sean emprendedores y quieran exhibir lo suyo en el mercado pueden escribir a particulares@mdemotores.com. Deben agregar cuál es el producto o servicio que ofrecen. 
@valenovalles

jueves, 5 de junio de 2014

10 cosas sobre Madrid a primera vista (cuando cruzas el charco por primera vez)


Hace poco más de dos meses que llegué a Madrid y ahora me percato que no he documentado nada. Nada de ese coctel de emociones, expectativas y experiencias que tienes al llegar a un país nuevo, con la maleta llena de ilusiones y proyectos. Así es como cierro los ojos y me traslado al 23 de marzo de 2014, cuando aterricé a eso de las 11 y algo de la mañana en el aeropuerto de Barajas, con algo así como unos 13 grados de temperatura -anunciaba el piloto aún en el avión-. Después del chequeo, las maletas y la cosa finalmente respiré ese aire madrileño. Un fresquito sabroso y silencioso. Eso fue de las primeras cosas que pensé al estar en el taxi camino a lo que sería mi nuevo hogar. “¡Cuánto silencio!”, me decía. Nada de corneteo, motorizados… solo el sonido de los cauchos rodando por la autopista, en un asfalto perfecto sin altibajos ni sorpresas.

Ese mismo día pero unas horas más tarde tomé el tren, que aquí se llama “la Renfe”. Sí, así en femenino porque aunque el tren es masculino, Renfe son las siglas de la Red Nacional de Ferrocarriles Españoles. Impecable, puntual y también silencioso, para el acostumbrado bululú del Metro de Caracas. Fue una de las cosas que a diario pueden resultar insignificantes pero me sorprendió.

Madrid es una ciudad hermosa, que te enamora con ese aire clásico pero moderno a la vez. Hecha para caminar (pausa y suspiro de enamorada). Con un montón de rincones por descubrir y sobre los cuales te preguntas si te alcanzará tu estadía en ella para hacerlo.

10 cosas sobre Madrid a primera vista, después de cruzar el charco:
(Vale acotar que estas son cosas sensibles al ojo de quien apenas la conoce y viene desde una ciudad en extremo diferente. Muchas aplicables a toda España).

1.- Está hecha para caminar. Empiezo aquí porque vengo del polo opuesto. De una urbe donde el peatón es atropellado, literalmente, siempre, no importa que la luz brille a su favor. En Madrid el transeúnte es prioridad. Y para quienes venimos de tierras venezolanas, eso sorprende gratamente.

2.- Se pierde el miedo a las calles. Pocas veces son los corneteos, los gritos o algún bululú raro en la calle. Recuerdo que una noche, cuando ya había caído el sol, un señor que caminaba detrás de mi botó algunas cosas al suelo y el ruido me hizo brincar. Ya me había fácilmente acostumbrado a la paz y tranquilidad. Volteé a mirar y recordé que ese sentimiento – de susto, de sobresalto- era normal en mi día a día en Caracas. Un arrebatón, un motorizado, el susto a ser robado, ultrajado, violado, etc, etc… te hacía vivir alterado.

3.- En el Metro, la gente anda con la cabeza metida en un ibook, el teléfono o cualquier otra cosa. Uno como observador sediento de conocer es detectado rápidamente como extraño a esa hábitat. 

4.- No se dice “salud” al estornudar sino “Jesús”. No es celular ni computadora, es móvil y ordenador, respectivamente. Nada del “buenas” venezolanísimo para saludar, aquí es un simple “hola” y “hasta ‘luogo’ – así se escucha- para despedirse. El inglés se pronuncia tal cual se lee, no es ‘wai fai’ es “wi-fi”, no es “espaiderman” es “espiderman” y así. La “SH” es muda de este lado del charco. Por eso es Sakira, en vez de Shakira y Susi, en vez de sushi. Sí, para los venezolanos Sussy es solo una galleta. Resulta curioso y gracioso.
5.- No es un beso para saludar, son dos.

6.- Aquí fuman mucho. Demasiado.

7.- Los desayunos suelen ser muy simples o dulces. Una tostada apenas, o una palmera o crossaint de chocolate. Nada del par de arepas con perico o caraotas. (Paso de eso. No me acostumbro)

8.- Se come muchísimo jamón serrano, chorizo, salchichón y todas esas cosas buenas y ricas también en calorías. Pero como se camina bastante también se compensa la cosa.

9.- Tiene extremos hermosos para conocer. Alcalá de Henares, Aranjuez, El Escorial. Más allá del típico centro o zonas turísticas cliché. Ideales para visitar un día sin mayor plan. Gracias al sistema de transporte todo está súper bien conectado.

10.- El tiempo pasa volando y más en verano, cuando oscurece después de las 9 pm. Por eso parece poco el tiempo para conocer a la linda Madrid.